El Gobierno de Aragón ha generado una gran confusión con sus contradictorias declaraciones sobre la reasignación de los Fondos Europeos del cancelado proyecto de Unión de las estaciones de Astún y Formigal por Canal Roya. 

Declaraciones de sr. Azcón que no se corresponden con el gráfico publicado por el Gobierno junto al borrador de presupuestos para 2024. 

Un gráfico recién publicado con el logotipo del Gobierno de Aragón relata superficialmente todas estas adjudicaciones, multiplicando misteriosamente los fondos asignados por Europa y el Ministerio de Industria a Aragón. Las cuentas se les hacen rosarios y no cuadran por ninguna parte. Vamos a intentar explicar todo este lío. Azcón declaró en Panticosa la retirada de 8 millones de €, de los Fondos Europeos de Turismo Sostenible, al proyecto de construcción de una carretera en Castanesa al frente de nieve de la ampliación de Cerler. Pero ahora, en el gráfico publicado por el Gobierno, recoge la reasignación de 4 millones de €, del descartado proyecto por Canal Roya, a la Comarca de Ribagorza. ¿En qué quedamos? ¿Lo asignan al proyecto de carretera por Castanesa? ¿A otro proyecto desconocido? Quito de aquí, pongo de allá. Un lío incomprensible.

El Plan Pirineos baja hasta la comarca minera. Aumenta todavía más la confusión incluyendo en el Plan Pirineos los fondos que dicen asignar a Daroca, Cuencas Mineras, Beceite y Fuendetodos. No especifica a qué proyectos se asignan estos fondos. Tampoco si cumplirán las condiciones impuestas por Bruselas, ni si se podrán ejecutar en el plazo marcado por los Next Generation. 

Para colmo de la confusión han incluido en dicho gráfico a Sobrarbe, que no tiene estación de esquí, pero no le asignan ni un euro por el momento. Esto ha generado el lógico malestar en la comarca.

Mientras los plazos de ejecución corren. Todo este barullo deberá aclararlo y dar a conocer dichos proyectos a la mayor brevedad, pues los plazos de ejecución corren implacables y aumenta el riesgo de que tengan que devolverse a Europa. 

El grueso de los Fondos Europeos de nuevo a la nieve. Pero Azcón continúa insistiendo en obviar la reducción progresiva de la nieve. Cometiendo los mismos errores de su predecesor Javier Lamban, el presidente Azcón insiste en destinar el grueso de los Fondos Europeos a proyectos en el sector de la nieve y en municipios próximos a las estaciones de esquí con alcaldes Populares a la cabeza. Su anuncio público en Panticosa contempla un paquete de inversiones, con Fondos Next Generation, enfocadas principalmente a relanzar las estaciones de esquí, pese a que cada vez nieva menos en el Pirineo a causa del cambio climático. La Plataforma en Defensa de las Montañas de Aragón compartimos el malestar de muchas comarcas aragonesas que han sido discriminadas a la hora de adjudicar fondos europeos para turismo sostenible. En cualquier caso, la reducción progresiva de la nieve en el Pirineo aconseja diversificar la inversión en turismo sostenible y respetuoso con el paisaje y la biodiversidad. 

Cumplir las condiciones que impone Europa. Hay que tener presente que los proyectos financiados con Fondos Next Generation deben cumplir el principio de “No Causar Daño” en el medio y deben ejecutarse en el plazo de tiempo establecido por el programa. En 2025 y sin posibilidad de prórroga. El incumplimiento de estas condiciones aboca a devolver los fondos a Europa. Bruselas ya puso objeciones a la financiación de la unión de Astún y Formigal por Canal Roya, que ahora ya carece de fondos europeos. La carretera en Castanesa al frente de nieve presenta también dificultades para justificar la financiación con Fondos Next Generation. Se desconoce el proyecto, no ha pasado Declaración de Impacto Ambiental y el mismo gobierno afirma que quizás no cumpla los plazos marcados por Europa. Entonces, entonces ¿le asignarán o no Fondos Europeos?

Promesas para 2030. El presidente de Aragón ahora promete grandes inversiones en los valles pirenaicos a 8 años vista. Largo lo fía. Promesas que no cuentan con financiación real. Pero a corto plazo tan solo cuenta con reasignar los 50 millones de fondos europeos a proyectos en las estaciones de esquí poniendo en serio peligro dicha financiación al ser proyectos difícilmente justificables ante Europa y que puedan cumplir con los plazos marcados.